Las condiciones de estilo de vida han variado conforme el paso de los años, ahora hombres y mujeres trabajan, o hay quienes se quedan en casa cumpliendo con las obligaciones del cuidado y la higiene de casa. Es evidente que las exigencias de vida han incrementado, la urbanización y métodos de movilización cada día son más sedentarios, como consecuencia el tiempo que se invierte durante la movilización de un lugar a otro ha incrementado, y esto ha impactado en el estrés que se vive en la actualidad.

La calidad de vida vital para mantener tu salud lo mejor posible, en especial si forma parte de tu vida diaria. Cuando el nivel de estrés incrementa en ti (más de lo que usualmente tiendes a estarlo) en tu trabajo o cualquier rutina que lleves a cabo cada día, algunas investigaciones sugieren que cuando tu nivel de estrés es alto, y no lo controlas, corres el riesgo de mantener una dieta poco saludable como mecanismo de compensación.

Las personas que viven bajo estrés laboral pueden mantener un riesgo alto de sobre exigencia de su propio cuerpo, al volverse un hábito la repercusión en la salud puede ser de alto costo. Derivado a ello una persona puede volverse completa o parcialmente sedentaria, llevar un patrón alimentario deficiente o con excesos, producir cansancio mental, somnolencia y disminución de la concentración de forma crónica.

Una curiosa investigación arrojó datos interesantes. Cuando las personas tienen mejor apoyo de sus jefes o encargados directos para realizar las tareas que necesitan en un día, tienden a mejorar el consumo de frutas o jugos de las mismas. Por el contrario cuando mantienen mayor estrés por problemas personales o laborales, las personas tienden a consumir mayor cantidad de grasas saturadas.

En general, una alimentación desequilibrada puede provocar fatiga por muchas razones, una de ellas es la obesidad, que conlleva a un alto riesgo de morbilidad en el futuro. Esto produce el incremento de costos médicos y métodos curativos, riesgo de ausentismo derivado a la enfermedad, y disminución de la productividad en lo que realices por la carencia de energía.

CHANDIA VASQUEZ, Fernanda Alejandra; VIDAL GRANDON, Karen Alejandra y CHIANG VEGA, María Margarita. Relación entre estrés laboral y adherencia a la dieta mediterránea (DM) en funcionarios de una institución de educación superior, Chile. Cienc Trab. [online]. 2016, vol.18, n.55 [citado 2018-03-27], pp.58-67.