Según la Revista Internacional de Epidemiología, con referencia al tema de la obesidad, se plantearon perspectivas interesantes:
Sugiere que el problema de la obesidad y la crisis de salud pudo haber sido causada por factores culturales conocidos como “pánico moral”, en donde dejamos de consumir determinados alimentos, o limitamos su cantidad debido al sobrepeso u obesidad que veíamos que aparecía cada día más.
La verdad es que se ha producido un aumento sutil en el peso corporal en lugar de una epidemia de obesidad, esta epidemia ha existido siempre, sólo que ahora se habla un poco más de ello, y la relación entre mortalidad y aumento de factores de sobrepeso.
Especulaciones como la forma del cuerpo puede ser más importante que la gordura, entre otros aspectos.
Un estilo de vida saludable debería dar importancia primero a la pérdida de peso. Según un estudio reciente sugiere que en muchos países se enfatiza el control de peso a tal punto que quizá no le damos tanta importancia como se debería a un mensaje y acciones globales, como lo es la actividad física.
Este interesante estudio encontró que las personas que son más sedentarias tienen una percepción de mayor sobrepeso corporal, independientemente de su IMC actual.
Por otro lado, de acuerdo a los perfiles nutricionales, Según la European Food Safety Authority, los perfiles nutricionales han establecido criterios diseñados para discriminar entre algunos alimentos de acuerdo a su contenido de nutrientes, clasificándolos como saludables y no saludables.
Con esta clasificación puede afectarse algunos alimentos, por ejemplo los frutos secos, están clasificados como alimentos con alto contenido de grasa, pudiendo confundir a los consumidores. Para ello se ha considerado que los consumidores mismos se orienten a sobre la clasificación de estos perfiles, y es ahí donde se denota la importancia del papel de un experto en nutrición, quienes pueden demostrar de mejor manera de qué forma podemos comer más sano.
